
El cuidado de la salud bucal en bebés se basa principalmente en la prevención.
Se trata de eliminar los factores de riesgo, mejorando la resistencia del huésped en este caso el bebé y haciendo una correcta higiene bucal.
Se va a aumentar el riesgo de caries si le damos biberón toda la noche y se hace una baja o nula higiene de la boquita del bebé.
Es necesario controlar la ingesta de azúcares en la dieta habitual del niño, disminuyéndola al mínimo.
También es muy importante cepillar sus primeros dientitos, se puede usar un cepillo pequeño y poca pasta dental no mayor que un chícharo. En caso de que no se pueda, se puede usar una gasa y limpiar con ella, los dientes del bebé.
Es importante evitar contaminar al niño con bacterias cariogénicas, ya sea besándolo en la boca o usando los mismos cubiertos que los adultos o el uso del chupón o pacificador envuelto en miel o azúcar.
Muchos padres no tienen conocimiento de la importancia de estas medidas preventivas.
También es necesario acudir con el odontopediatra para que establezca controles periódicos, ya que la colonización bacteriana más activa es entre loa 19 a 31 meses de edad, por lo tanto, la primera visita del bebé debe ser a los 2 años con el especialista.
Acostumbre a lavarles sus dientes a sus hijos por lo menos 3 veces al día, hasta los seis años es conveniente que el niño comience a cepillarse, pero siempre debe ser bajo supervisión de los padres y su revisión al dentista por lo menos dos veces al año.
Recuerde que siempre será más económicos los tratamientos preventivos.
Saludos
Dra. Harris